En la actual legislación educativa, la educación vial está considerada como uno de los denominados temas o ejes transversales del diseño curricular, y como tal, sus objetivos y contenidos se encuentran integrados dentro de los bloques de las diferentes áreas.

A partir de la publicación del RD 1007/1991 de 14 de junio que determinaba las enseñanzas mínimas correspondientes a la educación secundaria obligatoria, surgieron diversos materiales de apoyo al profesorado en los que se analizaba su inclusión en el conjunto de las enseñanzas. Sin embargo, a partir de esta fecha, los manuales escolares fueron incorporando diversos contenidos relacionados con el hecho social del tráfico y circulación de vehículos.

En efecto, la práctica educativa obliga a llevar a cabo una selección de objetivos y contenidos que se adaptan al desarrollo evolutivo en el que se encuentran los sujetos a los que se dirigirá un programa específico de educación vial, ya que tener cuidado de las situaciones de tráfico más habituales en la zona en la que se desarrolla la actividad vial, bien como peatones, viajeros o conductores.

A este respecto, cabe mencionar que durante la ESO es cuando se produce el inicio, en muchos casos, de la utilización de las vías públicas como conductores de bicicletas y ciclomotores.

Cualquier fin de semana, especialmente entre noviembre, es muy frecuente ver numerosos aficionados a la bicicleta pedaleando por las carreteras españolas, así como grupos de conductores de ciclomotores. El espectacular aumento de ciclomotores en nuestras carreteras y calles de los pueblos así como un mayor fomento y práctica del deporte ciclista, ha llevado también un mayor número de accidentes de tráfico. Es aterrador comprobar cómo, estadísticamente, los datos nos revelan que hay un gran número de jóvenes muertos menores de 18 años.

Por otra parte, los estudios de la DGT sitúan los ciclomotores como el tercer vehículo implicado en accidentes con víctimas, por encima de las motocicletas y autobuses.

El ciclomotor es un vehículo al que desean acceder la mayoría de los jóvenes, constituyendo, en muchos casos, en el primer eslabón de la motorización individual. Los datos son una realidad de lo que ocurre en nuestro país, y demuestran que si bien el número de heridos en accidentes ha descendido en ciclomotores y motocicletas, se incrementó el de muertos utilizando estos vehículos, siendo el tramo de edad entre 15 y 17 años el grupo segundo de mayor riesgo, con 89 muertos y 5989 heridos.

Es nuestro objetivo que la educación que vamos a impartir esté constituida por este aprendizaje de normas orientadas a crear entre el alumnado, hábitos de comportamiento encaminados a la adquisición del sentido y respeto vial.

El sistema de trabajo con este grupo va a variar mucho con respecto a los demás, ya que este año, y por primera vez, vamos a tratar la educación vial enfocada desde la prevención y actitud a tomar durante un accidente de tráfico o cuando nos encontramos con él. Es por ello, que contaremos con la ayuda de la Cruz Roja de Dénia que ofrecerá a los alumnos un curso PAS (Proteger, Alertar y Socorrer). Esta idea surgió debido al desgraciado accidente de este verano donde murió un joven que residía en nuestra población. Pensamos que sería interesante que cualquier persona tenga una idea, por muy básica que sea de cómo actuar ante estas desgracias, ya que una acción mínima puede salvar la vida a una persona.

También trataremos, a pesar sea de una forma sucinta, los tipos y efectos de las drogas, por supuesto que, desde un punto que verse sobre los efectos en la conducción. Este año será un proyecto pionero (tal como fue el año pasado en infantil y primaria), que nos servirá para ver qué relación puede haber entre la gente joven y la policía, y saber si los temas a tratar son de interés para ellos o no. En caso de que no, haremos una recogida de ideas, formándonos y preparándonos para desarrollarlo del año próximo.

Contaremos con la ayuda del material ofrecido por MAPFRE Departamento de Educación Vial y de lo adquirido por parte de edvial.com . Pondremos en marcha una serie de vídeos educativos editados por la DGT sobre la juventud y la conducción los fines de semana, como carreras a la muerte desde un punto de vista de jóvenes irresponsables y, finalmente, un video donde hablan accidentados, médicos, familiares y gente de salvamento.

Esperamos que todo sea para mejorar la calidad de vida en saber responder ante cualquier tema relacionado con el tráfico y el estilo de conducción de nuestros jóvenes, que repercutirá en una reducción de los accidentes y un perfecto equilibrio entre todos los usuarios de las vías públicas.

Un análisis de las estadísticas sobre accidentes relacionados con el tráfico en los países de la Unión Europea, pone de manifiesto que uno de los principales grupos de riesgo lo constituye los niños y jóvenes con edades comprendidas entre los cinco y los dieciséis años. Los mismos datos reflejan que el mayor porcentaje de accidentes los sufren cuando hacen uso de las vías públicas como peatones, aumentando progresivamente (especialmente a partir de los catorce años) el número de niños y jóvenes que se ven implicados como conductores de bicicletas y ciclomotores.

Es por ello que la Policía Local de Gata de Gorgos, un año más, planifica una serie de clases teóricas y prácticas para enseñar comportamientos viales, que son los que determinarán los objetivos generales de Educación Vial para esta etapa educativa. Los objetivos que formulamos a continuación, son los que hemos marcado para trabajar este año, y que contribuirán a desarrollar en los alumnos las siguientes capacidades:

1. Observar y explorar el entorno inmediato con una actitud de curiosidad, identificando las características y propiedades más significativas de los elementos que lo conforman así como las relaciones que se establecen entre ellos.

2. Descubrir, conocer y controlar progresivamente su cuerpo, los elementos básicos, sus características, valorando sus limitaciones y posibilidades.

3. Actuar, cada vez más, de forma autónoma a sus actividades habituales, adquiriendo seguridad efectiva y emocional, desarrollando sus capacidades de iniciativa y confianza en sí mismos.

4. Tomar conciencia ciudadana en relación al uso de las vías públicas y con el tráfico.

5. Comportarse adecuadamente como peatón acompañado, respetando las normas de circulación y seguridad vial.

Los procedimientos que vamos a desarrollar para conseguir los objetivos van a ser, entre otros, los siguientes:

– Desarrollar la observancia y hábitos de la misma para la adquisición del sentido vial.

– Ejercicios de observancia visual: observando directa o indirectamente el propio colegio y calles cercanos observando edificios, vehículos, calles, señales de tráfico …

– Distinción de sonidos y colores.

– Conocimiento de señales acústicos y lumínicos, respondiendo de forma rápida.

– Ejercicios de prudencia y rápida decisión: simulación de situaciones de tráfico, ejercicios de fomento de reflecxes, situaciones imprevistas, etc.

– Utilización de la acera sin salirse del bordillo y dominar el espacio para no chocar con los otros usuarios.

– Uso del paso para peatones sin salirse de las marcas viales.

– Interpretación de las luces del semáforo.

La primera dificultad con la que se encuentra el niño cuando se enfrenta al tráfico, es la limitación que tiene visualmente, proveniente de su pequeña altura y mayoritariamente que todo lo que hacen cuando van por la calle, es pura imitación de la figura adulta que le acompaña. Además, debemos destacar que muchísimas veces, la atención del niño se dirige hacia aspectos de muy poca relevancia, pudiendo crear situaciones de peligro sin que él se dé cuenta de la situación.

Decir que vamos a trabajar las mismas cosas en los 3 cursos que hay, ya que de este modo conseguiremos «picar» las ideas básicas y principales a los más pequeños, ya que su forma de aprender es a través de la repetición y la imitación. A continuación marcamos los diferentes contenidos con los que vamos a conseguirlo:

1. Conocimientos de los diferentes elementos que componen el entorno cercano de los niños: calles, mobiliario urbano, señales de tráfico, etc.

2. Las funciones de las normas y señales de tráfico dirigidos al peatón (señalización horizontal, señalización vertical, semáforos y señales de los agentes).

3. Comportamiento como peatón en su entorno cercano, la importancia del respeto a las normas de circulación y los medios de transporte.

4. Interés y curiosidad por identificar los elementos más característicos del entorno próximo.

5. Respeto por la diversidad de personas que circulan por las calles, valoración de las señales de tráfico: que sean comprensibles a su edad, desarrollar actividades que favorezcan el uso adecuado de los transportes.

6. Actitudes críticas ante las diferentes situaciones viales vividas en la escuela y fuera de ella.

Para valorar si están aprendiendo todo lo que hemos marcado, nos guiaremos por los siguientes criterios:

– El proceso de aprendizaje de los alumnos.

– El proceso de docencia tanto de la policía como de los maestros.

– La utilización de los materiales, tanto propios como de la escuela.

– La correcta observancia empleando los sentidos a la hora de cruzar o de ir por la calle.

– Identificar claramente el entorno y el mobiliario urbano que nos rodea.

– Resolver supuestos prácticos mediante ejercicios de simulación identificando los diferentes comportamientos y posibles consecuencias.

– Respetar las normas de utilización de las calles y aceras.

 3 AÑOS:

– Dar a conocer la figura y las funciones del policía.

– Cruzar el paso de peatones: importancia de hacerlo correctamente.

– Conocer perfectamente el semáforo: colores y significado de cada color.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro escolar.

 4 AÑOS:

– Dar a conocer la figura y las funciones del policía.

– Cruzar el paso de peatones: importancia de hacerlo correctamente.

– Conocer perfectamente el semáforo: colores y significado de cada color.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro escolar.

 5 AÑOS:

– Dar a conocer la figura y las funciones del policía.

– Cruzar el paso de peatones: importancia de hacerlo correctamente.

– Conocer perfectamente el semáforo: colores y significado de cada color.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro escolar.

(*) Como puede comprobarse, la programación de toda Educación Infantil es la misma para todos los grupos, ya que es muy importante sentar las bases desde pequeños y, en este grupo de edad, mediante la repetición. Como tan solo es de 2 horas todo el curso, no llegará a hacerse repetitivo o pesado.

La propuesta de trabajo va a desarrollarse por los 2 cursos del primer ciclo durante los meses que dura la actividad. Teniendo en cuenta que es en este espacio temporal cuando hay que trabajar en la «calle», parece adecuado por tanto, sostener y trabajar convenientemente los objetivos propuestos.

Debido al carácter interdisciplinario que confiere a todas las dimensiones transversales, se considera importante trabajar desde todos aquellos puntos que ayudan al desarrollo y autonomía del alumno. Sin embargo, hay que recalcar la correcta utilización del vocabulario común en materia vial, tanto oral como escrito.

A la hora de trabajar el segundo ciclo, estudiaremos la problemática que conlleva el tráfico, que puede y debe ser estudiada desde varios puntos de vista para llegar a una mayor comprensión del mismo:

– No constituyen temas de vital interés para la formación vial que el alumno entienda la importancia de una buena infraestructura (carreteras y medios de transporte) que hay en la sociedad actual?

– No constituye un importante aspecto dentro de la educación vial, preparar al alumno para que pueda hacerle frente con un espíritu crítico hacia el mundo de la publicidad, que le incitará a usar un determinado vehículo?

– No sería educación vial que el alumno conociera y cuantificara cómo, dónde y quién sufre los accidentes, porque a partir de estos conocimientos, podrá influir, un día no muy lejano, en su medio social?

Durante el periodo de educación primaria, los niños y las niñas harán uso de las vías públicas como peatones autónomos, sin embargo, en muchos casos utilizarán también, como pasajeros, medios de transporte, como el vehículo familiar, el autobús escolar … Igualmente, a partir de los 10 o 11 años, empezarán a utilizar la bicicleta en ocasiones muy concretas, como puede ser durante el periodo vacacional.

Estos comportamientos viales son los que determinarán los objetivos generales de la educación vial para esta etapa educativa.

Objetivos que formulamos a continuación y que contribuirán a desarrollar en los alumnos las siguientes capacidades:

1. Conocer el entorno físico de la localidad en relación con el tráfico, y desarrollar hábitos de conciencia ciudadana referidos a la circulación.

2. Desarrollar y adquirir hábitos de comportamiento correcto en relación con el tráfico, orientados a la adquisición del sentido vial.

3. Conocer las normas de circulación peatonal y adquirir hábitos de comportamiento y prudencia en el uso de las vías públicas, urbanas e interurbanas como peatón, identificando sus diferentes elementos y clases.

4. Utilizar adecuadamente y con sentido de la responsabilidad, los transportes particulares y colectivos, como pasajero, y valorar la importancia de la infraestructura en el transporte de personas y comercialización de productos.

5. Iniciar al alumno en la identificación y conocimiento de los elementos y principios físicos y mecánicos de la bicicleta, y adquirir el sentido de la responsabilidad referida a su conducción.

6. Interpretar y analizar críticamente los mensajes de la propaganda y publicidad, estableciendo las diferencias entre los mensajes institucionales y los dirigidos al consumo.

7. Valorar la importancia que tiene el respeto de las normas y señalización de tráfico y conocer su significado.

Los contenidos y materias a trabajar, serán las siguientes:

PRIMER:

– Dar a conocer la figura policial y sus funciones.

– Conocer perfectamente las indicaciones del semáforo.

– Empezar a relacionarse con las formas geométricas de las señales de tráfico, mediante señales reales (que ya las tenemos del circuito del año pasado), y transparencias.

– Ver vídeos cortos y educativos para comenzar a relacionarse con el tráfico del que forman parte como peatones.

– Situación real de cruzar por un paso de peatones sin obstáculos.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del colegio.

(*) Vamos a enfocarlo desde un punto de vista que cada año suben un escalón, por lo que primero saben como tienen que ir, después de que hay señales que regulan las formas de ir, al otro año conocerán formas, colores y significados, y así cada vez, más.

SEGUNDO:

– Dar a conocer la figura del policía, pero empezando ya ellos a definir y saber que piensan de nosotros, para poder darles una imagen exacta de cuál es nuestra tarea.

– Repasar el semáforo y empezar a indagar de quien los utiliza de forma habitual y que no los respeta, que hacen los padres cuando ven que los semáforos cambian de color, etc.

– Ver vídeos cortos y específicos profundizando un poco más entre las diferentes señalizaciones (ya saben relacionar formas geométricas con los colores, siendo el resultado el significado de la señal).

– Situación real de cruzar por un paso de peatones sin y con obstáculos.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro.

TERCER:

– Deben dominar perfectamente los diferentes tipos de señalización, reconocerla y respetarla.

– Para conseguir el punto anterior, trabajaremos con un sistema de fichas didácticas, donde la participación y la corrección sea fluida.

– Realizarán 2 tests para saber, los educadores, qué nivel tienen los alumnos y poder profundizar en los temas sobre la marcha.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro.

UN QUARTO:

– Asegurarnos de que es correcta toda la información vial que tienen, corrigiendo todos aquellos errores que detectamos.

– Ver qué saben y qué no saben del curso de educación vial del año pasado.

– Empezar a tratar sobre la bicicleta: costumbres, anécdotas y la forma correcta de ir con ella.

– Asegurarnos de que conocen las normas y señales de tráfico.

– 2 tests para ver qué nivel hay referente a materia vial debatiendo todos los puntos.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro.

QUINTO Y SEXTO:

– Debates y coloquios sobre normativa vial, normas de actuación frente a accidentes.

– Iniciación a las drogas y hábitos que influyen a la hora de conducir.

– Tests de educación vial y posterior corrección que nos ayudarán para ver el nivel de cultura vial que existe.

– Realizar correctamente un simulacro de evacuación del centro escolar.